Y bueno, ¿para qué nos hacemos guajes? El TEPJF pronunciará como ganador de la contienda al innombrable. Después de eso ya no hay vuelta atrás. Aunque se pida a ayuda a instancias internacionales todo quedará ahí.

La izquierda, al parecer, no pudo demostrar el fraude -lo que no quiere decir que no haya sucedido-, tema que es debatible según mi punto de vista.

Y no señores, no se trata de Andres Manuel Lopez Obrador, se trata de hacer las cosas limpias, se trata de ser justos, se trata de darle a cada quién lo que le corresponde ética y legalmente.

Se trata de que opere la justicia y que las cosas no se queden en un «perdón, me equivoqué» como en el reciente caso de Tres Marías y en muchos otros, la lista sería interminable.

Se trata de que la dignidad de cualquiera puede ser comprada muy fácilmente, aunque con esto se lleve al pueblo entre las patas.

Se trata de no queremos vivir más en la podredumbre.

Esto agoniza, el juicio madre es a las 5 de la tarde de hoy.

Mi más sentido pésame para todos aquellos que hemos creído en la democracia y en la justicia, en la verdad y la ética.

Lo siento mucho, en verdad.